Conforme pasa el tiempo, los aeropuertos que algún día presumieron de modernos y eficientes se van volviendo viejos y obsoletos.
No hace mucho, salí en vuelo nacional del AICM. Cuando llegué a la Sala B y vi los tableros mostrando los vuelos por salir y sus horarios, me preparé par la consabida demora. Dicho y hecho: las “pantallas” mostraban salidas “a tiempo” hasta 2 minutos antes de la salida de itinerario – cuando se apareció el letrero de “Demorado” en una docena de vuelos.
Precisamente enfrente de las pantallas de información de la Sala B, hay una caseta con el pretencioso nombre de “Informes”. Muchos viajeros acuden a la caseta para indagar a qué hora saldrá su vuelo, pues la pantalla solamente dice “Demorado”, lo que puede significar 10 minutos, una hora o más – como fue en mi caso. El pobre empleado no sabe que decir. Tiene una pantalla que muestra las rutas de los vuelos que están acercándose al AICM.
Basado en su experiencia y dependiendo que tan lejos aparezca del aeropuerto el vuelo por el que se le pregunta, nos dice: “Ya no tarda en llegar su vuelo”, o si se atreve, “Su vuelo llega en 20 minutos”. Se refiere al vuelo que una vez llegado, saldrá al destino que uno pretende llegar. Sin embargo, si se le pregunta de qué puerta saldrá el avión, la respuesta es: “No se sabe. Por favor vea la pantalla”. Ya eran las 9 de la noche y el vuelo saldría, como fue, con más de 1 hora de retraso.
El retraso era lógico. La pantalla mostraba 3 vuelos, de la misma empresa, saliendo a la misma hora, y otros más con diferencias de 5 minutos. Independientemente de que los vuelos salieran demorados debido a la acumulación de retrasos durante las operaciones del día, tres vuelos no pueden salir a la misma hora del AICM pues no cuenta con las pistas necesarias para sacar –o recibir—tres vuelos a la misma hora. El AICM tiene dos pistas, pero como sabemos de tiempo ha, se construyeron muy cerca una de otra, más cerca de lo que autorizan las Reglas de la Organización de Aviación Civil Internacional – OACI–, por lo que no se pueden utilizar simultáneamente. No entendemos entonces por qué el AICM programa la salida de 3 vuelos a la misma hora, cuando su Director General sabe perfectamente que esto es imposible y ocasionará retrasos automáticos e ineludibles. Lo mismo sabe la línea aérea pero acepta obligadamente los horarios que le impone el AICM. Sí, ya sabemos que el NAICM pronto será realidad. Mientras tanto, la administración del aeropuerto de la Ciudad de México actualmente en operación, deberían de apegarse a las limitaciones que la infraestructura del propio aeropuerto les impone, en vez de querer “crecer” a fuerza para no dejar de percibir los TUAS al bajar el número de pasajeros operados. Pregunto: ¿Es moral operar los millones de pasajeros que la Gerencia del AICM dice que operan pero con deficiencias y molestias, o lo correcto sería manejar menos pasajeros con mejores servicios y vuelos a tiempo? Como usuario frecuente del AICM, puedo asegurar que el importe que se paga por concepto de TUA no se ve reflejado en los servicios que presta este vetusto aeropuerto.
ZAPA.- La presidenta de la Asociación Mexicana de Agencias de Viajes – Filial Edomex –, dijo que se van a dar cursos a los agentes de viajes del citado Estado para que puedan crear y operar rutas de turismo receptivo. Un amable Zapador, viejo operador de turismo receptivo, tomó parte de su valioso tiempo para escribirnos y decir: “Cómo quiere esta señora, en su ignorancia de agente de Viajes (sic) que en el estado de México se hagan paquetes hacia (sus) lugares turísticos cuando los que incluíamos circuitos al Estado de México en nuestras ofertas internacionales hemos tenido que soportar los siguientes problemas que se presentaban de manera cotidiana:
1.- El Estado de México tiene los peajes mas caros de México (hasta $3.00 por kilómetro de autopista (ejemplo Toluca – Ixtapan de la Sal).
2.- El Aeropuerto de Toluca cobra un derecho de piso (a los autobuses de turismo), mas alto de lo que cobra el aeropuerto de la Ciudad de México, que ya de por si es ultra caro. Como un apoyo al Turismo del Estado de México, el Aeropuerto de Toluca no debería cobrar “derechos de piso” a unidades de transporte con placas Federales de Turismo.
3.- La señalización en carreteras y autopistas es lo que le sigue a PESIMO (a pesar de los $82 millones que el Presidente Calderón asignó a la Secretaria de Turismo Gloria Guevara precisamente para mejorar la señalización carretera, sin que nadie pueda decir donde terminaron estos millones.) — Lo que aparece en este último paréntesis es un agregado del titular de la Trinchera.
4.- Yo llamaría a las carreteras y avenidas de las Ciudades del Estado de México la sucursal de los cráteres de la luna en la Tierra – por el pésimo estado en que se encuentran.
5.- La policía estatal de estado de México no sabe lo que es turismo y en su ignorancia no solo no lo apoya, sino que lo ataca: detiene a los vehículos con placas federales de turismo con cualquier excusa ridícula y siempre acaba por pedir para el Chesco!!!
6.- La Sra. Presidenta de los Agentes de Viajes debe saber, y hacer entender a muchos hoteleros del Estado lo que es una tarifa neta y para qué sirve.
7.- Se debe hacer entender a los Policías (municipales y estatales), lo que es un vehículo de turismo trasladando turistas por el estado y los beneficios que esto le representa a la economía del Estado. No respetan la placa Federal de Turismo y no dan facilidades ni por 5 minutos para bajar o subir el turismo en calles aledañas a sitios de interés, bajo amenaza de retirar la placa federales o extorsionar a nuestros choferes y guias. —
Ultimo agregado del que escribe esta Trinchera: Este punto es aplicable a todos los Estados de la República, salvo tal vez a los de la Ruya Maya en el Golfo y Sureste aunque de repente los taxistas se alebrestan en todos lados. Ya no es noticia cuando los taxistas, apoyados por la indiferencia de las policías locales de Puerto Vallarta y La Paz, detienen a los autobuses de turismo en sus operaciones legítimas de traslados entre hotel y aeropuerto o muelle – o viceversa. A los turistas les queda el temor de que pueda pasarles algo malo pues los taxistas son exageradamente agresivos. Les queda un mal sabor de boca y se prometen no regresar… Pero las autoridades locales y estatales poco o nada hacen por resolver el problema y los operadores locales nunca saben cuando se volverá a presentar el problema.
Agradecemos al Zapador por su colaboración. Si recibimos algún comentario o respuesta, se la haremos llegar.
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